Nunca llevo la cámara de fotos encima cuando entrevisto a un hombre que se encuentra muy próximo a disolverse en la Nada, pero siempre tengo mi cuaderno y un boli bic apunto. Y entre que no sé dibujar y que me había bebido cuatro tercios me salió este retrato del Papa. Jaja. Se me olvidó ponerle un brazo.
La última entrevista del Papa
Recuerdo mis días con el Papa, cuando nos hacíamos pajas juntos con las primeras luces des del alba. Pero ya no está
El Papa ha recibido un telegrama que dice "¡Estás despedido!" El pobre hombre se encuentra desconcertado. Me ha llamado por teléfono para quedar a tomar unas cervezas, y ya lo saben ustedes, el Papa no tiene fin. Yo le he calmado; le he dicho que ha hecho su trabajo, que ha sido un buen burócrata, que su parecido con Adolf Eichmann es asombroso
El Papa: (Algo borracho) Y esto...es que yo...yo...¿qué he hecho? Eh...eh...
Dominguet: Tranquilo. Los jefes son así. No es nada personal, les importas una mierda; y un día deciden que eres prescindible. Si, todos los jefes son unos hijos de puta, pero al menos el tuyo tiene la ventaja de que no existe
El Papa: Ya, ya... Me hacía ilusión acabar convertido en una pequeña figurita de plástico con forma de santo, encontrarme omnipresente en todas las tiendas de souvenirs del Vaticano...¿pero cómo seré recordado?¿Cómo un pequeño dios o cómo un monigote? Eh...eh...
Dominguet: Como un monigote
El Papa: ¿Un monigote?
Dominguet: Un monigote
El Papa: Eh...si...jeje....mejor un monigote que caer en la nada
Dominguet: No. La nada es indiscutible. Irás directamente a la Nada. Allí está Fraga, otro monigote.
El Papa: ¿Fraga?
Dominguet: ¿Ya te has olvidado de Fraga, verdad? Tranqui, no es demencia. Yo mismo no recordaré quién eres tú pasado mañana
El Papa: Me siento raro...¿qué me está pasando Dominguet?
Dominguet: Jajajaja
El Papa: ¡¡La Nada!!
Dominguet: No tengas miedo...simplemente te estás desintegrando
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