sábado, 27 de septiembre de 2014

El Presidente de los Estados Unidos de Catalonia

Reproducción de una de las chapitas que se repartieron dias antes de las elecciones para elegir al presidente de los Estados Unidos de Catalonia


El Presidente de los Estados Unidos de Catalonia

(Una farsa a blanco y negro)


Una pipa mágica

1. Rajoy encuentra la sabiduría

(Ciudad de Mandril. Otoño en el despacho del presidente. Rajoy está de rodillas, desesperado, clamando a los cielos)

Rajoy: ¡Oh dioses! ¡Venid en mi auxilio, es el fin! ¡Los hijos ya no hacen caso a sus padres! ¡Todo está perdido! ¡No encuentro mi peluca!

(Un gran resplandor. Entran dos dioses al despacho del presidente Rajoy)

Dios uno: ¿Nos has llamado?

Rajoy: (Asustado) ¿Quienes sois? ¿Por dónde habéis entrado? La puerta está blindada

Dios uno: Somos tus dioses. Puedes arrodillarte o encender incienso, si quieres. Lo que más te apetezca 

Rajoy: (Postrándose en el suelo) Oh dioses, ayudadme...Ha llegado el fin y yo no encuentro la peluca, mi peluca...

Dios dos: ¿Nos has reconocido? Qué raro,  pues a nosotros nos gusta mantenernos siempre al margen de toda acción...

Dios uno: Siempre alejados de toda acción...

Dios dos: Durmiendo la siesta

Dios dos: Una siesta de un millón de años

Dios uno: Hasta que tus ruegos nos despertaron

Dios dos: ¿Nos despertaste por una peluca?

Rajoy: Oh, si, dioses. La situación es desesperada, el mundo se acaba, los bancos quiebran, los trabajadores abandonan sus puestos....Y no sé dónde he dejado mi peluca

Dios dos: ¿Abandonan sus puestos de trabajo? ¡Esto es intolerable!

Dios uno: Empiezan abandonado el trabajo y terminan escribiendo farsas teatrales ¡Hay que poner remedio!

Rajoy: Oh dioses, si, gracias, gracias... Con una peluca tendré bastante, una peluca rubia, de pelo rizado, pero que no llame demasiado la atención. Con la peluca podría llegar fácilmente a la frontera sin ser reconocido...

Dios uno: Lamentablemente ya no me quedan pelucas (Dirigiéndose al Dios dos) ¿Y a ti?

Dios dos: Ya no me quedan. La última se la di a Botín antes del infarto, cuando bailaba desnudo sobre la mesa del despacho...

Dios uno: Como ves, amigo, ya no no quedan pelucas...

Rajoy: ¿No?

Dios dos: No nos quedan

Dios uno: Solo tenemos pipas

Rajoy: ¿Pipas? No lo había pensado ¿Ustedes creen que podría atravesar de incógnito las calles de Mandril fumando en pipa?

Dios dos: Es dudoso, aunque, eso si, parecerías algo más inteligente....Sabemos de lo que hablamos....

Dios uno: Nos dedicamos al asunto de las pipas...

Dios dos: Si, nos dedicamos al asunto de la sabiduría, y la sabiduría tiene forma de pipa

Rajoy: Jamás había escuchado nada semejante ¿La sabiduría tiene forma de pipa?

Dios dos: Si, nosotros fabricamos la sabiduría ¿Te gustaría probar la sabiduría?

Rajoy: No

Dios dos: ¿No? Me sorprendes ¿Qué es lo que deseas entonces?

Rajoy: Una peluca, llegar a la frontera, el acceso a mi cuenta corriente, poder, brillar en la oscuridad, pasar a la historia....

Dios uno: Y sin embargo ya es demasiado tarde ¿No lo oyes? (Se escuchan golpes y gritos tras la puerta)

Rajoy: No, no escucho nada

Dios uno: ¿No oyes a las masas enfurecidas e iracundas golpeando la puerta?

Rajoy: ¿Qué es lo que quieren?

Dios dos:  ¡Tu cabeza!

Rajoy: Por favor, ves y diles que aquí no hay ninguna cabeza....

Dios dos: Lo siento, no podemos intervenir directamente en el trascurso de la historia....Tendrás que decírselo tu mismo. Asume tus responsabilidades...

Rajoy: ¿Yo? (Volviéndose a la puerta, sin abrirla, dirigiéndose a la masa enfurecida) ¡No estoy! Escuchad, bien ¡No estoy! ¡Volved al trabajo!

Masa enfurecida: ¿Qué trabajo? ¡No tenemos trabajo!

(Las masas enfurecidas e iracundas golpean con más saña la puerta)

Rajoy: (A los dioses) No funciona. ¿Tenéis todavía la pipa?

Dios dos: (Sacando una pipa descomunal, de alrededor de uno o dos metros de longitud) Te presento a tu pipa ¿Te gusta? Construida en los cielos, te abrirá los ojos.  Incluye manual de instrucciones y el consumible, cultivado en la fértiles tierras de la bienaventuranza....

Rajoy: Rápido, rápido...no hay tiempo que perder....¿Qué hay que hacer?

Dios uno: ¡Absorbe!

Rajoy: Si, pero antes una pregunta....¿Provoca adicción?

Dios dos: (Se miran) No lo sabemos. Tu serás el primero en fumarla, se trata de un consumible experimental...Solo se ha probado con cobayas...

(Los golpes crecen. La puerta está a punto de ceder)

Rajoy: ¡ A toda prisa! ¡Encenderla! ¡Encender la pipa de la sabiduría!

(Los dioses  encienden la pipa)

Rajoy: (Fumando) ¡¡Por España!!

(Una gran nube de humo que brota de la pipa de la sabiduría, cubre todo el escenario. Se escucha una tos. Después la enorme carcajada de los dioses)


Rajoy, asombrando al mundo



2. Rajoy revela sus intenciones en una rueda de prensa/ La rueda de prensa de Mariano Rajoy


(La nube de humo de la pipa de la sabiduría se disipa. Estamos en una rueda de prensa, Mariano Rajoy ocupa la tribuna, se dirige a los periodistas)


Rajoy: Bueno, ¿y qué?, ¿qué les ha aparecido mi intervención? (Se enciende una pipa)

(El periodista 1 levanta la mano)

Periodista 1: ¿Se puede fumar?

Rajoy: No, no se puede, pero corramos un tupido velo. Esto será una fumada entre amigos. ¿Me queda bien la pipa? Me han dicho que parezco más inteligente.

Periodista 2: Estoy todavía sorprendido. ¿Está seguro que desea que publiquemos lo dicho durante su exposición? ¿Sus declaraciones son oficiales o simplemente son un globo sonda?

Rajoy: Ni una cosa ni la otra. Son un compromiso que realizaré hoy mismo, durante este encuentro con ustedes.

(Murmullos)

Periodista 3: ¿Lo sabe alguien más? ¿Lo sabe su mujer?,  ¿la secretaría general del partido?

Rajoy: Tan solo lo sabe Ángela Merkel, el presidente del Banco Central Europeo, Christine Lagarde y alguien más que no recuerdo su nombre.Su respaldo es unánime. Están todos de acuerdo.

Periodista 1: ¿Lo hará vestido o desnudo?

Rajoy: Vestido ¿Alguna pregunta más?

Periodista 2: ¿Podría hacer el anuncio de nuevo, más solemne, incluso? En segundos conectaremos en directo con el telediario...

Rajoy: Por supuesto, estoy preparado...

Periodista 2: ¡Atento! Tres, dos, uno...Entrando....¡En el aire!

Rajoy: (Con voz solemne) Mandrileños, españoles, la situación es grave, muy grave. Sin dudarlo, he decido dar un paso adelante. No hay vuelta atrás. Españoles...¡Voy a suicidarme en directo!

(Se escuchan algunos aplausos, atrás, entre el público)

Rajoy: ¿Alguna pregunta?

Periodista 2: ¿Se suicidará ahora?

Rajoy: Si, hoy mismo, ahora. En estos momentos mi testamento se está imprimiendo en una imprenta estatal privatizada, nacionalizada de nuevo, y vuelta a privatizar. Se buzoneará y se repartirá en la puerta de todos los colegios y oficinas de empleo de todo el país.  El testamento está ilustrado por unos dibujos hechos por mi mismo, a todo color.

Periodista 3: ¿Nos puede hacer un adelanto?

Rajoy: Por supuesto. Me despediré de los españoles como el último presidente de España. Tras de mi, ya no habrá más presidentes...

(Murmullos en la sala)

Periodista 3: ¿Morirá?

Rajoy: Moriré, si, la realidad lo demanda. Pero solo moriré figuradamente. Porque emanando del cuerpo del último presidente de España apareceré, renacido, convertido en un nuevo ser de un país unido, una tierra nueva con una sola lengua...

Periodista 2: ¿Podría ser más claro? ¿En que tipo de ser se va a convertir?

Rajoy: (Carraspendo)  En el presidente de Cataluña

(Agitación en la sala, murmullos)

Rajoy: Mejor dicho; en el president de los Estados Unidos de Catalonia.

(Los fotógrafos realizan sus instantáneas. Flashes en la sala)

Rajoy: ¿Me queda bien la pipa?, ¿qué tal estoy de perfil? ¿Parezco más interesante?

(Rajoy fuma. El humo envuelve el escenario)



No hay problema sin solución



3. Problemas con el ejército español. La acalorada discusión de Rajoy con un general refractario


(Rajoy y un General con bigote reunidos. Discusión encendida.)


General: ¡Protesto! ¡Es inaudito! ¡El ejército se declara en contra!

Rajoy: ¡El pueblo votará si!

General: El pueblo no votará.  Debe de suspenderse inmediatamente la convocatoria del referendum, señor presidente

Rajoy: ¡Imposible! Todo esta en marcha, las encuestas son favorables. La integración en Cataluña es el único camino, ya no hay vuelta atrás. Incluso tengo preparado el discurso conjunto entre las cortes españolas y el Parlamet sobre la disolución de España...¿Quiere que le lea el final?

General: No es preciso

Rajoy: Se lo leeré en cualquier caso, escuche: "España se diluirá en la historia. Dentro de mil años, a penas unos pocos conocerán que un día existió. Ocupará, si acaso, unas breves lineas en un libro de texto. En un millón de años España habrá desaparecido completamente. No quedará rastro alguno. Ni una mención, ni un recuerdo" ¿Le gusta? Imagino que justamente después, todos los diputados se incorporarán de sus escaños y aplaudirán de pie mi intervención durante un largo rato.

General: ¿Por qué esta inquina con España? ¡Es intolerable!

Rajoy: Yo amo España. Pero si tengo que elegir entre quedarme con los principios o los símbolos me quedo con los principios.

General: ¿Y cuales son los principios?

Rajoy: No tengo principios, pero tengo esto (Le muestra, desenrollando, un sello enorme, del tamaño de un póster)

General: ¿Qué es esto? ¿Es un sello? Es delirante, ¿a quién se le ha ocurrido esta idea?

Rajoy: A mi, se me ha ocurrido a mi. Ya no será necesario pegar los sellos a las cartas, serán las cartas las que se peguen a los sellos.

General: No me refiero al tamaño, eso está bien. Es impactante. Lo que es totalmente absurdo es esa cara, la cara del sello y la leyenda

Rajoy: ¿Le molesta la cara?

General: Si, me molesta la cara ¿Quién es?

Rajoy: ¡Soy yo!

General: ¿Y por qué aparece usted de perfil con una pipa en el sello? Usted no fuma

Rajoy: ¿No le gustan las pipas? ¿No le gustan los presidentes que fuman en pipa?, ¿o acaso prefiere un presidente con peluca? ¿Querría un presidente huyendo a la frontera, tratando de escapar, escondido tras peluca rizada y amarilla?

General: ¿Y esto que es?

Rajoy: La nueva marca

General: Aquí pone "Mariano Rajoy presidente de los Estados Unidos de Catalonia"

Rajoy: ¿Le gusta?

General: No me gusta nada

Rajoy: Pues le tendrá que gustar. Así es. Y le tendrá que gustar también la bandera.

General: Eso si que no. Yo por ahí no paso. No juraré la bandera

Rajoy: Observe, la bandera de España no es otra cosa que un plano detalle de una bandera catalana. ¡Cómo si estuviese ampliada con lupa!

General: Le advierto, no siga esta aventura. El ejército español no permanecerá indiferente ¡Se levantará!

Rajoy: ¡Pues que se acueste! ¿No se da cuenta usted que tenemos los mismos intereses? Y si no tenemos los mismos intereses, seguro que tenemos los mismos principios...

General: Señor presidente, seamos razonables, ¿no se da cuenta de que soy demasiado mayor para aprender catalán?

Siempre es posible un presidente del pueblo

4. Rajoy en el programa "Tengo una pregunta para el presidente"


(Plató de televisión del programa "Tengo una pregunta para el presidente" Luces de colores. Música de concurso televisivo. Público)

Presentador: Y aquí con todos ustedes...¡El presidente Mariano Rajoy!

(Aplausos. Rajoy aparece corriendo hasta llegar al mismo centro del escenario, situándose junto al presentador del programa. Chocan las manos. Rajoy saluda al público. Rien)

Presentador: Bienvenido señor presidente ¿Nervioso?  Antes de comenzar le resumiré la mecánica del programa. (El presentador lee una tarjeta) De entre las preguntas enviadas por los telespectadores se seleccionará una, y solo una. Usted tendrá hasta un máximo de treinta segundos para contestar. Pasado este tiempo un plausómetro decidirá la aceptación popular de su respuesta. Si supera un cierto umbral de aplausos,  habrá dominado con éxito la prueba. Por el contrario, si apenas recibe los aplausos necesarios, se abrirá una trampilla, justamente situada bajo usted,  por donde caerá descendiendo por un tobogán que le llevará a vérselas con el público de nuevo, pero esta vez, encontrándoselo cara a cara en las próximas elecciones. ¿Está preparado señor presidente? ¿Acepta el reto?

Rajoy: Acepto el reto

(Aplausos)

Presentador: (Removiendo sobres del interior de una urna transparente, de entre los que saca uno. Lo lee) Atención, señor presidente. Carmen García, cuarenta y cuatro años, desempleada y vecina de Mandril, tiene una pregunta para usted (Pausa) "¿Sabe cuanto cuesta un café?"

(Sonido del tic tac de un reloj)

Rajoy: (Con cara de preocupación) Saben...No voy a responder a esta pregunta,  y no la responderé porque ni yo ni ustedes deberíamos conocer siquiera el precio del café. Yo les aseguro que en una posible integración de España en Cataluña...a todos nos sudará el coño y la polla.

(Exclamaciones del público)

Rajoy: ¿Y saben por qué nos sudará la polla? 

Público: (En coro) Nooo

Rajoy: ¿Y quisieran saber por qué nos sudará el coño?

Publico: (En coro) Siii

Rajoy: ¡Porque el café no tendrá precio! Instalaré máquinas gratuitas de café en las calles, oficinas y centros comerciales que funcionarán hasta que caiga el sol!

(Aplausos. Ovaciones del público)


Rajoy vendiendo su proyecto



5. Rajoy en el círculo de empresarios

(Rajoy está reunido con algunos grandes empresarios y financieros alrededor de una mesa, evidentemente, circular)

Rajoy: ¿Pero es que todavía tienen dudas?

Empresario 1: ¿Pero esto es seguro?, ¿qué riesgos hay?, ¿podríamos perder parte de nuestras fortunas?

Rajoy: Me decepciona. Me habían informado que usted era un hombre de valores, hecho a sí mismo ¿Y ahora titubea?

Empresario 1: Me hice a mi mismo en parte, pero mis riquezas las obtuve mediante la herencia...

Rajoy: ¿Es que no ha visto el gráfico? Observen...(Se dirige hacia la pantalla donde hay expuesto un gran gráfico) La primera taza de café nos despierta, la segunda nos vuelve inquietos, la tercera ingeniosos. Y a partir de la cuarta taza de café os encontramos acelerados y nerviosos..Es aquí donde se incrementa la productividad y las compras, disparándose hasta la décima taza de café...

(Aplausos)

Empresario 2: ¿Y a partir de la décima taza de café, qué ocurre?

Rajoy: Hay dudas al respecto. Es posible que aumente la agresividad, pero es seguro que los decesos de entre los mayores de 65 años se duplicarán. ¿No se dan cuenta? Lo que nos ahorremos en pensiones podría destinarse a la reducción de impuestos a las grandes fortunas 

(Aplausos)

Rajoy: Al mismo tiempo fomentaremos la democracia. Si nos unimos en la gran Cataluña, cualquiera podrá poseer un trocito de esta. Mi objetivo es generar dividendos a todos ¡Cataluña cotizará en bolsa!

(Apausos y ovaciones)

Empresario 2: ¡Rajoy president!

Empresario 1: ¡Viva la gran Cataluña!


Rajoy se hace mayor


6.  Rajoy escribe sus memorias.

(Ha pasado el tiempo. Rajoy se encuentra envejecido y en silla de ruedas)


Rajoy: ¿Por dónde íbamos?

Escribiente: Decía usted (Lee) "Yo, Mariano Rajoy, ciento un año de edad. Después de una larga e intensa vida, llena de sorpresas y siempre al servicio del pueblo catalán..." Y después se quedó dormido.

Rajoy: Ah si...ya recuerdo. Déjeme pensar... No se me ocurre nada. 

Escribiente: Pues estamos al principio de sus memorias...y tan solo llevamos una linea.

Rajoy: Paciencia. Esta será mi gran obra. He calculado que abarcará doce tomos...¿Por donde iba?

Escribiente: Decía usted (Lee) "Yo, Mariano Rajoy, ciento un años de edad. Después de una larga.." 

Rajoy: (Interrumpiéndole) Ah, si...ya recuerdo. Déjeme pensar...No se me ocurre nada. ¿Desea hacerme alguna pregunta?

Escribiente:  No, la verdad, no me apetece ahora

Rajoy: Venga hombre, no sea tímido...

Escribiente: (Pensándoselo y improvisando) ¿Cómo empezó todo?

Rajoy: (Se enciende la pipa) La culpa fue de la sabiduría (Echa el humo a la cara del entrevistador y ríe) Durante un instante de lucidez, solo uno. Fue hace mucho tiempo, cuando todavía existía España ¿Se acuerda de España?

Escribiente: No, yo ni siquiera había nacido 

Rajoy: Da igual. En aquel tiempo las masas estaban enfurecidas, las estadísticas aún maquilladas, caían libremente. Yo mismo me encontraba sujeto a múltiples investigaciones y acusaciones de corrupción, la deuda era estratosférica...

Escribiente: ¡Como actualmente!

Rajoy: (Molesto) Ya, ya...Además estaba la cuestión catalana. Todo estaba fatal. Así que empujado por las circunstancias preparé las maletas, cuando de repente, mi vida dio un giro inesperado....

Escribiente: ¿Se le apareció el espíritu de Margaret Teacher?

Rajoy: No, eso fue posterior...Pero por cierto, tengo su brazo incorrupto en casa. Me hubiera gustado más que fuera la cabeza, pero no pudo ser. ¿No le parece más próximo y más humano hablar mirando a los ojos de la cabeza momificada de Margaret Teacher que tratar de hablar con un brazo incorrupto?

Escribiente: Si me da a elegir, no sabría que decirle. A mi me gustan más las conversaciones fluidas...

Rajoy: ¿Por dónde iba?

Escribiente: (Lee) "Mi vida dio un giro inesperado" 

Rajoy: Mi vida dio un giro inesperado cuando todo estaba perdido...Entonces recordé aquella frase de Sun Tsé de "El arte de la guerra". Apunte, es muy importante...

Escribiente:  (Escribiendo) ¿Cómo si fuese una ocurrencia suya, verdad?

Rajoy: ( Asintiendo) Todo estaba perdido. Y sin embargo, me dije, por crítica que pueda ser la situación y las circunstancias en las que me encuentro, no debo desesperar; en las ocasiones en las que todo es temible es cuando nada hay que temer; cuando se está rodeado de todos los peligros es cuando no hay que tener miedo de ninguno; cuando se está sin ningún recurso es cuando hay que contar con todos; cuando se es sorprendido es cuando hay que sorprender al enemigo. Lo vi todo claramente. Me levante y alzando la voz grité "¡Si Cataluña se va de España, España se incorporará en Cataluña!" 

Escribiente: ¿De verdad?

Rajoy: Lo importante es que vi la luz ¿Cómo explicárselo? Mantengo la teoría de que por algún extraño motivo, quizá por una concatenación de hechos casuales a lo largo de la historia, dio como resultado que el cociente intelectual de los españoles era menor que la media mundial. Esto, claro, me permitió ganar las elecciones, si, pero a la larga las consecuencias no podían ser más que catastróficas. Si Cataluña ingresaba en Europa ¿Quién iba a necesitar un país de retrasados como España en la Unión Europea? 

Escribiente: ¿Lo apunto en sus memorias?

Rajoy: Se lo diré con otras palabras; cuando yo era joven la propaganda institucional trataba de promocionar a España en el extranjero con el lema de "Spain is diferent" ¿Se da cuenta? La diferencia se encontraba en la talla moral y cultural, no tanto en las horas de sol ni en la extensión de las playas. Lo que se ofrecía como reclamo turístico era un país de retrasados. La destrucción del paisaje a cambio de una paella... Y por favor, no escriba nada de lo dicho...

Escribiente: Una pena. porque eso "Destruir el paisaje a cambio de una paella" me parece sencillamente genial...

Rajoy: Escriba, escriba...Todo estaba perdido, el abismo me cercaba y la masa enfurecida golpeaba a mi puerta. Pude haber huido oculto bajo una peluca amarilla, pude haber acabado con mi vida, ya que no había remedio. Y sin embargo, di un paso adelante para dar la vuelta a la realidad, de tal manera que todo permaneciera exactamente igual. España se integraría en Cataluña y el país se mantendría unido, si, bajo otro nombre, ¿pero qué más da? ¿O acaso es más importante la forma que el concepto?

Escribiente: ¿Me lo está preguntando o es que tengo que escribirlo así? 

Rajoy: A usted, a usted, le pregunto a usted...

Escribiente: No sé. En realidad no tengo ni idea de lo que me está hablando

Rajoy: Se lo preguntaré de otra manera...¿Qué es más importante, los principios o los símbolos?

Escribiente: ¿Los símbolos?

Rajoy: ¿Por qué?

Escribiente: No lo sé. Quizá los símbolos sean importantes porque permanecen en el tiempo, mientras los principios se pueden cambiar en cualquier momento...Cómo la iglesia católica, ¿no? Se mantiene la imagen del niño Jesús por los siglos de los siglos mientras van cambiado múltiples veces los principios y los dogmas

Rajoy:  Justamente, aunque yo hice exactamente lo contrario. De manera que conseguí que el Estado permaneciera, pero con otro nombre. Escriba...¿Está preparado? Me gustaría que mis memorias acabaran o empezaran, da igual, con una cita que se me acaba de ocurrir...

Escribiendo: Estoy preparado...

Rajoy: (Se enciende la pipa) El poder ni se crea ni se destruye, solamente se transforma

(El humo de la pipa inunda el escenario)



Masa enfurecida entrando al despacho presidencial


7. Rajoy vuelve al pasado

(Nos encontramos de nuevo en el año dos mil quince. La masa enfurecida golpea la puerta. Rajoy fuma la pipa. Junto a él los dos dioses, que ríen)

Dios uno: ¿Qué tal, qué te ha parecido? ¿Mejor que la peluca, verdad?

Rajoy: ¿Dónde estoy?, ¿qué ha pasado? ¿Soy presidente de los Estados Unidos de Catalonia?

(Los dioses ríen)

Dios dos: Ibas lanzado. Tan solo te faltaba invadir Marte, la conquista del más allá por Cataluña, la llegada a la inmortalidad...

Dios uno: La sabiduría era buena, eh. Todo un éxito.

Rajoy: ¿No tenéis más? Solo un poco más, para poder acabar la historia...

Dios uno: No, a mi no me queda más...¿Y a ti?

Dios dos: No, a mi tampoco...

Rajoy: Quiero más...un poco más de sabiduría por favor...

Dios dos: Pues no queda, tio, te la has fumado todo. Eres un ansias

Dios uno: Oye Rajoy....Muy bueno eso de destruir el paisaje a cambio de una paella...

(Rien)

(Golpes en la puerta)

Rajoy: ¿Siguen ahí?

Dios uno: Si, parece que la masa enfurecida lleva un buen rato aporreando la puerta. ¿No vas a abrir?

Rajoy: Ahora mismo no puedo. Tengo que salir por la ventana para hacer algunos...ya saben, recados...Si entra la masa enfurecida, díganla que...¡volveré!

(Rajoy coge la maleta y se dirige a la ventana) 

Rajoy: (Desde el alfeizar de la ventana) ¡Por España! (Salta)

(Los golpes en la puerta crecen. La puerta cede. Entra la masa enfurecida al escenario)

Masa enfurecida: ¿Se puede? En nombre del Comité por la Higiene Pública, venimos en busca del depuesto presidente de España, Mariano Rajoy, acusado de maltrato general y destrucción de lo público en beneficio del interés corporativo privado. Atentado contra la dignidad general y chistes bastante malos ¿Dónde está? Sabemos que se encuentra aquí...No se puede ocultar de la masa enfurecida

Dios dos: Acaba de saltar por la ventana

Masa enfurecida: (Asomándose a la ventana) ¿Es ese Rajoy? ¿A dónde va? ¿Porque corre en calzoncillos?

Dios uno: Está obsesionado con llegar a la frontera pasando desapercibido (Ríe) 

Masa enfurecida: ¿Se puede saber quienes son ustedes? ¿Tienen algún tipo de relación con Mariano Rajoy?

Dios dos: ¿Se refiere a algún tipo de relación especial? No, en realidad pasábamos por aquí por casualidad cuando...en fin...Le diré la verdad; somos dioses. Fuimos llamados por Rajoy durante la siesta. Le dimos de fumar de la pipa de la sabiduría...

Masa enfurecida: No es nada personal, pero me temo que van a tener que diluirse en el éter cómico. Los dioses ya no existen

Dios uno:  ¿No existimos? Si hace apenas un rato estábamos aquí, gastando bromas ¿Qué hacer? ¿Y si nos trasformáramos en una singularidad? 

Masa enfurecida: ¡Saludos a Moloch, Crono y Prometeo! ¡Adios!

(Los dioses se diluyen en el éter)

(A negro. Cae el telón)

Abucheos. Un aplauso, solo uno, de algún despistado entre el público)

























lunes, 15 de septiembre de 2014

La resurrección de Botín

Botín y su nueva configuración después de muerto, asustando a Dominguet en un banco del parque. En realidad esta obrita podemos considerarla el IV acto de "Botín se va al Paraiso"


La resurrección de Botín

Acto IV

(Hay niebla. Un cuarentagenario lee la prensa sentado en un banco en el parque y toma notas en el cuaderno. Es Dominguet. Se oyen ruidos de entre la maleza, alguna rama rota. La noche es profunda)

Dominguet: ¿Quién hay ahí?

(Se vuelven a escuchar los ruidos, como pisadas)

Dominguet: ¿Hay alguien ahí? (Coge sus cosas, disponiéndose para irse)

(Aparece alguien de entre las sombras,  con un aspecto muy deteriorado, como de un yonqui. Muy delgado, arrastra los pies)

Botín: No, no te vayas...

Dominguet: Lo siento. No tengo dinero....

Botín: No te vayas....

Dominguet: Tengo prisa, cosas qué hacer, algún asunto pendiente, a medias...

Botín: Eso mismo le dije a La Muerte...Y ella me respondió que había tenido setenta y nueve años para resolver e ir concluyendo mis asuntos. Me dijo que otros no habían tenido tanta suerte, como si yo tuviera algo que ver con sus desdichas. No me entregó ni un minuto extra.

Dominguet: No es posible...Eso mismo me dijo alguien...una figura pública.  La hice una entrevista después de muerto. Lo último que supe es que se dirigía a la Nada o a un paraiso fiscal, no lo recuerdo bien. Hace tanto tiempo...¿Tú eres...? 

Botín: (Interrumpiendo a Dominguet) Si, soy Botín. Reconocí tu voz cuando hablabas solo, aquí mismo, sentado en este mismo banco del parque...¿Fuiste tú el que me hizo la entrevista, verdad?

Dominguet: Si, te hice la entrevista...pero te equivocas...No hablaba solo...Bueno, si, hablaba solo, pero no se lo digas a nadie...

Botín: Si, ya me parecía que estabas chiflado...¿Para qué querías entrevistarme entonces? ¿No has hecho nada con ella?

Dominguet: Traté de vender le entrevista a algunos periódicos, pero imposible. Ni siquiera la leyeron. La transformé en una obra de teatro....en una comedia

Botín: ¿En una comedia? ¡No me jodas, tío!

Dominguet: Bueno, quería hacer una comedia, pero salió una tragicomedia. Se la envié a alguna compañía. Creo que jamás la han representado. Igual no soy muy bueno escribiendo. Al final la publiqué en un periodiquito de noticias absurdas en internet que yo mismo escribo, por aquello de ejercitar la mente La última vez que miré las estadísticas, tan solo había entrado a  la entrevista dramatizada trece personas. Y no estoy seguro siquiera de que la hayan leído.

Botín: Consigo hablar con alguien tras morir, antes de disolverme en la Nada, y resulta que es contigo...¡Qué perdida de tiempo!

Dominguet: ¡Has vuelto de la Nada! Alégrate. La última vez que hable contigo te encontrabas en una situación desesperada, a punto de desaparecer para siempre de la corriente histórica

Botín: ¿Qué he vuelto de la Nada? Mírame. ¿Te parezco que estoy en algún lugar?

Dominguet: Tu cuerpo ahora es mucho más joven. Es cierto que tienes muy mal aspecto, pero en fin, el futuro es tuyo

Botín: ¿Mio? Ahora soy un lumpemproletario. No hay ningún futuro aquí, en este cuerpo....

Dominguet: Vuelve con los tuyos entonces....¿O es que vienes a quejarte de lo mal que te ha tratado la vida? ¿No eras tú el que decías que uno se construye su propio destino?

Botín: Nunca he dicho tal cosa, al menos no hay pruebas escritas. No, no puedo volver con los mios...ya no me aceptan, no me dejan pasar....se rien de mi, dicen que yo no soy yo, no me abren la puerta, me echan los perros encima, llaman a la policía...No soy nadie

Dominguet: La verdad es que estás muy próximo a la Nada. No quisiera estar en tu lugar.

Botín: La Muerte no me engañó cuando me dijo que me llevaría a la Nada. No podía imaginarme que esto era la Nada, este cuerpo, sin alicientes para maravillarme. No tiene sentido alguno mi vida. En realidad ni siquiera sé si soy Botín. Me parece un sueño, una fantasía. Un recuerdo que cada día se me hace más borroso. No tengo identidad en este cuerpo de otro que no soy yo, 

Dominguet: Ahora es tu cuerpo, ¿qué vas hacer con él?

Botín: ¿Yo? No sé. Esperar a que llegue La Muerte otra vez, asaltar a una viejecita, quizá. Comenzar a beber vino, si es que a eso se le puede llamar vino. ¿No tendrás algo para dejarme, no? Te lo devolvería...

Dominguet: No, es que no llevo suelto....

Botín: Da igual, aunque sea unos billetes. Cuando consiga entrar en mi casa...ya verás

Dominguet: La verdad es que no tengo nada, otro día quizá...

Botín: Ya es otoño y refresca por las noches...Podrías dejarme dormir en tu casa. hace mucho tiempo que no duermo en una cama. 

Dominguet: Es que...en fin...no sé...Es que hubo un incendio y se quemó mi piso...

Botín: ¿Y en casa de tu madre? 

Dominguet: Es que...cómo decírtelo... se quemó  también la casa de mi madre....

Botín: ¿Conoces a alguien que me pueda alojar unos días?

Dominguet: El incendio se extendió por toda la ciudad

Botín: Ya veo

Dominguet: Bueno, he quedado...Me tengo que ir...

Botín: ¿No me quieres hacer una entrevista?, ¿quieres que quedemos otro día? 

Dominguet: Con la entrevista que te hice tras tu infarto, me vale...gracias 

Botín: Nos veremos, ¿no?

Dominguet: No sé, es difícil. Voy a estar muy ocupado en los próximos treinta años...Igual nos vemos. Bueno...qué decirte...Adiós o mejor...¡Bienvenido a la muerte!



(Dominguet se pierde en la niebla. Botín se queda solo. La luz se va. La noche se apodera del parque)

Fin
























domingo, 14 de septiembre de 2014

Botín se va al Paraiso

Dominguet y Botín hablando por walky talky


Botín se va al Paraiso

Acto I

(Aparece entre tinieblas Dominguet. Avanza, se dirige hacia el público. Tiene el rostro blanco. Lleva un objeto en la mano, un walky talky).

Dominguet: A veces hablo con los muertos. "¡No está bien reírse de los muertos!"-dicen- Pero a nadie le importa que los muertos se rían todos los días de los vivos. 

(El walky talky comienza a hacer ruido)

Dominguet: ¿Botín? ¿Botín? ¿Estás ahí? Cambio

(Ruido como de interferencias. Escuchamos la voz de Botín)

Botín: (Solo voz) ¡Hola Hola! ¡Aquí Botín! ¿Alguien me escucha? ¿Alguien me escucha? Cambio

Dominguet: Te escucho Botín. Aquí Dominguet. Cambio

Botín: Te recibo Dominguet. Cambio

Dominguet: ¡Ay Botín! ¿Cómo es que te fuiste así, tan de repente, sin avisar? Seguro que te dejaste algún asunto, un objeto, el móvil quizá. Si, el móvil. Mediante walky talky es imposible realizar una entrevista en condiciones a un muerto. Cambio

(En el otro extremo del escenario aparece Botín, hablando por el walky talk y sin pantalones)

Botín: (Ya visible) Me he dejado todo, hasta los pantalones. Esa manía de entrar en casa sin llamar, sin avisar. No está bien. Cambio.

Dominguet: No está bien, pero, ¿qué esperabas? ¡Es la muerte! Suele estar por ahí, al acecho y por regla general no avisa. Suele entrar sin llamar. Cambio.

Botín: Un burofax, un cablegrama por lo menos....¡Hay que avisar! ¡Y no sé cómo ha conseguido las llaves! Se ha encendido uno de mis puros y me ha echado el humo a la cara. Me picaban los ojos, he tosido...Cambio

Dominguet: ¿Y no has hecho nada? ¿No sabes que la muerte no mola? Cambio

Botín: ¿Qué iba  a hacer? No sabía que la muerte tenía ese aspecto. Parecía un don nadie, sin estudios, con aspecto de yonqui. Cambio.

(Se oyen ruidos, interferencias, la comunicación se complica)

Dominguet: ¿Qué decías? No te oigo.¿Qué tenía qué? Cambio

Botín: ¡Qué tenía aspecto de yonqui!

Dominguet: ¿Qué?

Botín: ¡De yonqui! ¡Yonqui! ¡Aspecto de yonqui!

(Los ruidos lo llenan todo. El escenario pasa a negro).



La Muerte visitando a Botín

Acto II

(Botín está en su piso, en ropa interior. Alguien golpea la puerta con insistencia)

Botín: ¿Quién coño es? (Siguen golpeando la puerta) ¡No estoy! ¡No estoy! 

(La puerta se abre y aparece La Muerte. Tiene mal aspecto, como de un don nadie, un sin estudios, un yonqui).

La Muerte: ¿Es  usted Botín?

Botín: ¡No estoy! ¿Quiere que se lo diga otra vez?

La Muerte: No es preciso, ya lo sé. Usted ya no está

Botín: Eso, eso, no estoy. Lo ha comprendido perfectamente. Así que lárguese por donde ha venido, y si me hace el favor,  no dé portazos al salir.

La Muerte: Me temo que es usted quién no ha comprendido, que es usted quién se va a ir. Me tiene que acompañar...

Botín: ¿Qué dice? ¿Está usted loco? 

La Muerte: No lo sé ¿Eso es una caja de puros? (Coge uno, lo enciende, echa el humo en la cara a Botín)

Botín:  ¿Quién le ha dejado pasar?, ¿cómo ha conseguido las llaves de mi piso? Le advierto que esto es allanamiento de morada, ¿o es un escrache? ¿Quién se ha creído que es?

La Muerte: ¿Yo?

Botín: Si, usted

La Muerte: La Muerte

(Botín se dirige al teléfono, lo descuelga, hace una llamada. Está algo nervioso)

Botín:  ¿Hola? ¿Policia? Se me ha colado un tipo en casa que dice ser la muerte, un loco. Por favor, envíen algo...no sé, lo que sea.  Soy Botín, Emilio Botín...¡Oiga. oiga! ¡Me ha colgado! (Dirigiéndose a La Muerte) ¡Ha visto, me ha colgado!

La Muerte: No, no le han colgado. Ni siquiera han descolgado el teléfono

Botín: (Cada vez más nervioso) Me falta el aire

La Muerte: No tenga miedo, es solo un instante....

Botín: Me duele el brazo izquierdo

La Muerte: Y un dolor agudo en el pecho...Lo sé

Botín: Me duele el pecho

La Muerte: Ya se lo he dicho

Botín: (Acalorado, renqueando, rebuscando) ¿Dónde están?, ¿dónde están?

La Muerte: No busque. Las pastillas sublinguales de nitroglicerina para el infarto, no le servirán para nada...

Botín: Ahá, ¿Y esto qué es? (Encuentra el frasco de las pastillas pero caen al suelo desparramándose. Botín se arrodilla para recogerlas. La Muerte las pisa)

La Muerte: No se moleste, de verdad. Cada segundo que pasa usted es más patético. Mantenga la dignidad (Le pone la mano en el hombro) Acompáñeme

Botín: ¿A dónde me lleva? ¿Al Paraíso? 

La Muerte: Si, a un paraíso fiscal (Se ríe a grandes carcajadas) ¿Esto qué es?

Botín: Un jarrón chino, de la dinastía Ming

La Muerte: ¿Me permite? 

Botín: Ni hablar

La Muerte: Me gustaría verlo. ¿Sabe? Me encanta  lo delicado ¿Se da cuenta de que lo frágil requiere siempre de cuidados y atenciones? Déjeme ver el jarrón

Botín: Ni de coña

La Muerte: ¿Por qué?

Botín: Es mio

La Muerte: No sea así, déjeme verlo....

(Botín estrella el jarrón contra el suelo, rompiéndolo en mil pedazos)

Botín: Ahí lo tiene, disfrútelo...

La Muerte: Sabía que lo haría. Este jarrón caído sobre el suelo, roto, dará más ambiente a la escena. Ya que ha sido usted mismo el que ha incorporado el atrezzo a su propio final, nos podemos ir.

Botín: Ahora no me apetece

La Muerte: ¿Ahora no? ¿Acaso tiene algún asunto urgente que hacer?

Botín: Si, si, tengo algunas cosas pendientes, a medias...

La Muerte: Ha tenido setenta y nueve años para resolver y cerrar sus asuntos, mucho más tiempo que los desahuciados, que los muertos que encontraron muertos en sus pisos. Los suyos. De usted. No, no voy a esperar más. Nos vamos.

Botín: Déjeme al menos que me ponga los pantalones

La Muerte: A donde vamos no son necesarios los pantalones

Botín: ¿Nadie lleva pantalones en el Paraíso?

La Muerte:  Nadie

Botín: ¿Qué será de mi?

La Muerte: ¿Quiere saberlo? (Sacando un libro y leyéndole una cita) "Debes perder toda esperanza de que la posteridad te reivindique..."

Botín: (Interrumpiendo a La Muerte) ¿Y "El País", "El Mundo", "El ABC" "La enciclopedia Larusse"?

La Muerte: No digas chorradas (La Muerte continúa leyendo) "Debes perder toda esperanza de que la posteridad te reivindique. La posteridad no sabrá de ti. Desaparecerás por completo de la corriente histórica. Te disolverás en la estratosfera, por decirlo así. De ti no quedará nada: ni un nombre en un papel, ni tu recuerdo en un ser vivo. Quedarás aniquilado tanto en el pretérito como en el futuro. No habrás existido"

Botín: ¿Y mis propiedades?

(El escenario pasa a negro)

Reproducción a boli bic azul de un recuerdo del jarrón chino de la dinastía Ming desaparecido


Acto III

(Dominguet y Botín aparecen de nuevo en el escenario hablando por walky talky. Les envuelve la niebla. Ruidos, interferencias)

Dominguet: ¿Rompió el jarrón? ¿Rompió el jarrón Ming? Cambio

Botín: Si, ¿y..?. ¿Acaso no puedo hacer con mi dinero lo que quiera? Cambio

Dominguet: ¿Y los que vienen detrás? Cambio

Botín: ¿Las generaciones futuras? A mi, plim. Ya estoy muerto. Qué arreglen el jarrón con pegamento. Cambio

Dominguet: Si usted está muerto, cómo es posible que estemos hablando por walky talky. ¿No le parece un tanto extraño? Cambio

Botín: Estoy muerto, no lo dude. Peor todavía, me encuentro en la Nada. La Muerte me engañó, me dijo que me iba a llevar a un paraíso fiscal, y mire, ahora usted se encuentra hablando con un eco, una resonancia...algo parecido a una psicofonía...(Ruido)

Dominguet: ¿Hay alguien ahí? Hola, hola....

Botín: ¿Se acuerdan de mi? ¿Alguien se acuerda de mi? (interferencias)

Dominguet: Hola, hola...¿Hay alguien ahí?. Hay alguien por ahí para hacerle una entrevista. No sean tímidos, hablen, de lo que sea...Les escucho ¡Digan sus últimas palabras! ¿Hay Alguien? ¿Alguien? ¿No hay nadie? Cambio y cierro.

(Ruido)

Fin. En realidad existe un IV acto titulado "La Resurrección de Botín". Pinchar si alguien se aburre.










sábado, 6 de septiembre de 2014

Propuesta: construcción de un panteón de momias célebres

Las clases medias, si quieren, también podrán acceder al museo


Momias célebres

Al principio pensé denominar este proyecto con el nombre de "Panteón de Muertos Ilustres" pero después lo reconsideré, pues nadie quiere ver el cadáver de un ilustrado. Propongo que se llame "Museo de Famosillos Muertos", puede molar más. En realidad es un museo de momias, famosos disecados, celebridades en formol y quizá algún ilustrado en salmuera.

El museo que propongo es un museo turístico donde se exhibirán  los cuerpos momificados de la escena político cultural del país, por decir algo. Esto es, tipos con alguna relevancia mediática o al menos que hayan conseguido pasar a una enciclopedia o a una serie de televisión y que evidentemente han perdido la vida. Mi museo será un servicio público con vocación de convertirse en un negocio privado. 

"Lo esencial es invisible a los ojos" El dinero está siempre delante nuestro pero nunca lo vemos; por ejemplo, Moscú.  Durante decenas de años miles de personas han hecho cola para ver la cabeza disecada de Lenin. Cuando era pequeño se programó el último episodio del dictador Franco, tumbado, allí, en la capilla ardiente, mientras pasaban otros tantos tipos haciendo el saludo nazi. El último capítulo duró muchísimas horas. No había mucha acción, el protagonista permanecía siempre en silencio. Aprendí la lección; el público quiere ver a los muertos, y allí donde hay público siempre hay dinero.

El público quiere ver muertos. Este es el negocio, disecar a los famosos. Ante la falta de iniciativa privada y de emprendedores propongo hacer lo habitual en estos casos; una inmediata intervención estatal e inversión pública para crear la infraestructura y después entregársela al gran capital. Es una operación clásica, como construir una impresionante red ferroviaria y canalizaciones por todo el país y después regalarla. Para que mi museo de monstruos tenga éxito exige la intervención del estado.

Durante un primer estadio  deberán formar parte del patrimonio público todos los famosos que vayan falleciendo. Una comisión de sabios se encargará de dilucidar qué cadáveres se considerarán de interés general y cuales no.  En poco tiempo, cinco años a los sumo, debido al crecimiento exponencial, dispondremos de un vasto fondo que exhibir. Pujol, Chiquito de la Calzada, Felipe Gonzalez, Vargas Llosa, se expondrán en el museo más visitado del mundo. Los miércoles será a mitad deprecio, al considerarse día del espectador.

Todos vamos a morir, pero unos morirán menos que otros. Ser disecado será como alcanzar una mortalidad inmortal y continuar en el candelero al menos durante mil años más. Sin embargo esto no es suficiente, pues mi museo de momias tiene vocación  internacional. Se trataría de convertir el mercado de cadáveres en algo parecido al mercado del arte. Subastas públicas, compras secretas, precios inflados. Considero que no necesario poseer el cuerpo completo, con la cabeza bastaría o un miembro, como el brazo incorrupto de Santa Teresa, incluso un órgano, como el cerebro laminado de Einstein. Los niños de todo el mundo podrán por fin contemplar el cuerpo crionizado de Walt Disney. 

Gracias a este singular museo se acelerará la investigación  de nuevas técnicas de conservación. Mientras tanto se utilizarán procedimientos clásicos, la taxidermia, el formol, la congelación, la salmuera y el aceite de oliva. Imaginen una lata de sardinas a escala humana donde asomen la cabeza algunos amigos del comercio como Escohotado, Milton Friedman y Albert Boadella. El arte no está reñido con la necrofilia. En cuanto el museo sea privatizado cualquiera podrá ser expuesto en él. La muerte, ya lo hemos dicho, es ese lugar donde uno ya no es visto, aunque esté vivo. Con dinero suficiente cualquiera podrá solicitar su momificación y descansar en pose jovial junto al rey Juan Carlos. Y ser visto permanentemente. Por suerte no todo el mundo tiene dinero, así evitaremos el disgusto de descubrir que junto a la momia de Tutankamon reposa el cuerpo liofilizado del carnicero de Móstoles, compitiendo también él, codo a codo, por la inmortalidad.

En la entrada principal al gran almacén de mi museo de los horrores podremos leer la siguiente leyenda "De la Nada vienes y en Nada te convertirás". A medida que se vayan retirando algunos cuerpos disecados que han pasado de moda,  se amontonarán en los sótanos, esperando el final de los tiempos, por los siglos de los siglos.















 
Free counter and web stats