Psicoterapia para proletas atomizados

Esta imagen nos debería angustiar a todos

¡Dominguet construye en su laboratorio un psicoterapeuta!

A falta de imaginación Dominguet irá escribiendo poco a poco en este periódico cada uno de los propósitos para 2010 y años venideros, antes que se le acumulen y la lista sea tan extensa que ningún ser humano sea capaz de transcribirla a papel, y por lo tanto llevarlas a la práctica. Hoy el propósito 273 "Psicoterapia para proletas atómizados"

Superar las psicoterapias del mundo moderno para remplazarlas por una psicoterapia popular, de proletas que se niegan a ser proletas, colectiva, y donde el yo y el individuo no se pierda entre el nosotros, sino que se reafirme con él, exenta de especialistas, donde todos seamos psicoterapeutas, todavía no ha llamado a la puerta de Dominguet. Al ser un individuo aislado y atomizado, no se entera de muchas cosas. Además a veces compra El Pais. Y eso le hace sentirse culpable. Pero Dominguet, gracias a su instinto, se ha propuesto fabricarse un psicoterapeuta a su medida. Buscará un madelman que tiene encerrado en una jaula y lo liberará. Bueno, era una escultura conceptual, y lo seguirá siendo, y ahora será mucho más sugerente. La escultura permanecera vacía, con las puertas abiertas. Repetimos; Dominguet liberará a su madelman y lo sentará en una silla, y de 13:00 a 14:00 horas, todos los martes del año, Dominguet comenzará a hablar y hablar a su diminuto psicoterapeuta de plástico. Es decir; para contarlo TODO. Lamentablemente a los psicoterapeutas de piel y ojos no se les cuenta todo. No se les puede contar todo. Tan solo se les cuenta lo que necesitan escuchar. Lo demás, lo verdaderamente importante, las cuatro horas frente a la pantalla de la tele y el ordenador, se silencia. Y si se comenta es por encima, sin entrar en detalles. Uno puede hablar de un simple e instantaneo gesto de su amante que le causa pesar durante horas y dias, pero jamás habla de como le insulta y se deja insultar durante horas, dias y años por la televisión o por su jefe. En fin, Dominguet desembolsará 55 euros a su psicoterapeuta de plástico, que permitirá al mismísimo Dominguet solicitar un permiso sin sueldo o quizá con el tiempo, ahorrar para acudir a una de esas clínicas fascistas para que le hagan una dentadura postiza.