jueves, 20 de mayo de 2010

Reconstruyendo a los tres cerditos



Final del cuento


¡No eran cerdos, eran hombres!

Mandril mola. La construcción del palacio de la bella durmiente también mola. Pero hay algo oscuro y sospechoso en esos tres cerditos que pasean de la mano por una de esas calles peatonales de cartón piedra.

La marea de turistas desciende en busca de sombra, una terraza y un refresco de cola. Los cerditos cantan, bailan claqué, tropiezan y dicen "jijijiju" y caen monedas sobre sus cuerpecitos. Pero ocurrirá un dia; llegarán los tres cerditos apartando y volcando las mesas que encuentren en su camino. ¿Irán en busca de Micky el rabioso y Donald seisdedos antorcha en mano junto a un Pluto tiñoso? Se encaminan al palacio de la bella durmiente. Lo van a incendiar. ¿Qué ocurre aquí? ¿Por qué huyen los turistas? ¿Qué hay bajo esos disfraces raidos de las mascotas? ¿podría ocurrir que hubiera hombres? ¿Y bajo la piel de los turistas, qué hay?

No hay comentarios:

 
Free counter and web stats