Debate: imbéciles Vs bicicleteros

Debate de la semana: ¡imbéciles versus bicicleteros!

Me encuentro reunido con el representante a nivel nacional de los imbéciles y con un bicicletero. El asunto: debatir sobre feo y lo bello. Hago sonar un gong y ya está; comienza la discusión.

Dominguet: Lo horrible nos envuelve; ¿hay alguna posiblidad de adentrarse en la belleza?

Imbécil: ¿Necesitamos la belleza? Si realmente alguien la necesitara por algún motivo, ya existe una máquina que te saca de lo feo con solo apretar el acelerador. No se trata de crear belleza por doquier, sino que a medida que lo mostruoso crece, ir saliendo unos metros más allá, a más 120km/h

Bicicletero: ¡Pero eso es llevar lo monstruoso a superar nuevos límites!

Imbécil: Seré claro; mucho me temo que usted es el clásico individuo que no tiene coche, bien por incapacidad, bien por que ha fracasado en su vida, y eso le genera resentimiento y envidia contra todos los automovilistas

Bicicletero: No tengo coche, utilizo la bicicleta como medio de transporte

Imbécil: ¡No tiene coche! ¡Lo sabía!

Bicicletero: Usted es un firme partidario de la feo. Lo sé. Prefiere un Mandril donde los automóviles hablen más alto que las personas.

Imbécil: No, quiero un Mandril donde las personas no hablen en absoluto. ¿Quiere belleza? Acuda al Parque de Atracciones o asome la cabeza por la ventanilla del coche el fin de semana en una salida esporádica al Safari Park

Bicicletero: Entiendo; quiza le resulte molesto un Mandril donde los vecinos hablen claro y alto. Donde ellos mismos decidan, sin intermediarios, los asuntos que afectan a sus vidas

Imbécil: Me lo imagino yendo de compras al Ikea en una bici, cargando en el transportín la compra mensual del Carrefur...¡patético!

Bicicletero: Moderador, ¿puedo insultar al imbécil?

Dominguet: Lo que usted haga está bien hecho, ya hay demasiados imbéciles en el mundo imponiendo su propia imbecilidad a los demás. Por otra parte, ningún partidario de la imbecilidad debería sentirse ofendido por ser lo que es. Adelante pues.

Bicicletero: Bueno, tengo realmente ganas de insultarle, pero, me temo que el no es consciente de su propia estupidez. Trataré de que entre en razón.

Dominguet: Haga usted lo que considere más apropiado

Imbécil: Ja, ja, ja. ¿Un Mandril con huertecitos urbanos? ¿Donde las adventicias se abran camino entre el asfalto? ¿Con bicileteros aquí y allá? No se da cuenta de que eso es el pasado. Ya existen en el mercado especialistas que saben lo que nos conviene mucho mejor que usted, es decir, que un mero friegaplatos

Bicicletero: Lo que usted quiere decir es que necesita de un 4x4 para sentirse un poco menos insignificante. Algo especial. Más interesante. ¿Pero tenía que gastarse tanto dinero?¿no le bastaba con una nariz de quita y pon de payaso?

Imbécil: ¿Todos iguales? ¿Con cara de Mao? ¿Eso es lo que quiere para los mandrileños?

Bicicletero: Quiero usar la bicicleta para ir al huerto, ¿tiene algún problema? Pero tambien a la biblioteca y a un lugar donde no sea fácil distinguir de que se trata; si trabajo, placer o arte. Sin duda las tres cosas. Quiero usar la bicicleta para ir en busca de mis amigos, de mi cuerpo, de la fiesta. ¿Acaso no lo sabe? Mandril llegará al porvenir montada en bicicleta, o no llegará el mañana

Imbécil: Lo sospechaba, usted es un pringao

Bicicletero: ¿Pringao?

Imbécil: Quiere sustituir los motores por el canto de los pájaros. ¿Quiere pajaritos? Existen documentales, y si quiere librarse de los coches para siempre, dejese barba y larguese a una montaña perdida.

Bicicletero: ¿Marchar de Mandril? Mandril ya no tiene límites. Mandril está es todos los sitios.

Imbécil: ¡Pues suicídese!

Bicicletero: ¿No se da cuenta de que es usted el que se está suicidando, y al mismo tiempo está llevando a la muerte al resto?

Imbécil: A mi plim

Hay demasida tensión. Sobre todo después de que el imbécil pasara con su 4x4 por encima de la bici del bicicletero. Es entonces cuando Dominguet decide intervenir, y así lo hace:

Dominguet: Propongo un receso en esta animada discusión. Hacer el pino, masturbarnos un poco y comernos algunos alimentos sin transgenizar. ¿Están de acuerdo?

Imbécil: Vale, pero pagando.