Método para conseguir el Nobel

Dominguet, experimentando con su propio cuerpo sobre como invisibilizar a Esperanza Aguirre y ser feliz

Hacia la invisibilización de objetos y personas

Cuando tras un experimento se consiguió invisibilizar por primera en la historia de la humanidad a un indigente, todos los mandrileños del mundo sabían que a partir de ese mismo instante se iniciaba un camino imparable por las sendas del progreso y del desarrollo.

Así es como por fin se pudo volver a pasear por las ciudades. Lamentablemente, lo que aparentemente estaba llamada a ser la mayor revolución del milenio produjo algunos efectos secundarios. Para ilustrar este asunto quisiera recitar un poema de Bertold Brown, desaparecido durante la siesta:

Primero desaparecieron yonquis e indigentes
molaba

Después desapareció el Tercer Mundo
¿Y qué? Yo no era tercermundista

Más tarde desaparecieron feos y gordos
¡Qué risa tia Felisa!-me dije-

Despues desapareció mi perro
Pero ya era demasiado tarde

Pero no era tarde; porque el derecho al acceso a la invisibilización se amplió a todos y todas. Cualquiera ahora podía invisibilizar lo desagradable. Efectivamente, el empeño en resolver los problemas mediante la invisibilización de las personas y las cosas, pronto llevó a la humanidad a rodearse de vecinos y objetos invisibles, y esto, finalmente acabó con los problemas lumbares. ¿Por qué los hombres invisibles iban a ir a la fábrica o la oficina teniendo siempre una nevera llena a su disposición? ¿Por qué ostias iban a obedecer a un tipo si tenías a su disposición un cuchillo invisible?. Amigas; la deserción cuartelaria, el absentismo laboral y el amor libre se desató por fin absolutamente imparable. ¿Que podía hacer la humanidad entonces? Lo único que podía hacer era invisibilizarse y hacer desaparecer la Tierra. ¡Un mundo invisible!. ¿Habiamos llegado al socialismo? No lo sé, lo único cierto es nunca más se supo del viejo mundo, pero eso si, se podía escuchar el constante e interminale zapatear de millones de hombres y mujeres bailando claqué