No perdemos la esperanza de que Dominguet pueda volver a abrir la ventana y embrigarse de nuevo de luz
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¡No veo nada!
Dominguet se ha levantado completamente a oscuras. Ha tanteado hasta la ventana, la abierto y nada. No hay luz. Mandril ha debido quedarse sumergida en una noche brutal
Sin embargo los servicios públicos funcionan con normalidad, los bares siguen abiertos, las madres llevan de la mano a sus niños al colegio. Pero no hay luz. Uno puede accionar el interruptor y sentir que el calor vuelve a las bombillas, pero han dejado de iluminar. No hay destellos en esta noche ya interminable, y claro, Dominguet no para de tropezar. Lo que no sabe Dominguet es que se ha quedado ciego. ¡No ve nada!. Ya tiene varios chichones. Pero no pierde la esperanza de que algún día se restrablezca el fluido eléctrico. Nosotros, desde este periódico tambien tenemos la esperanza de que Dominguet se opere de cataratas.
1 comentario:
Dominguet ciego¡¡
Rápido consiganle un teclado braille o nos quedaremos sin sus historias¡¡ Bueno quizá unos cuantos metros de venda tampoco estaría mal, por lo de los golpes... aunque eso es un mal menor, claro
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