En un moderno auto a pedales todo es posible
Amor y CO2
En uno de los comentarios del articulito "Poesía y amor en Internet" una lectora nos avisa de que "El amor en persona también tiene sus gastos en CO2, aunque sólo sea el generado en el desplazamiento para ver a la persona amada"
Es probable que el amor por internet sea un desastre tanto en terminos de destrucción mediambiental como en alienación, pero la advertencia de que amor en vivo genera su propia carga de emisiones de CO2 podría llevarnos a un nuevo tipo de conciencia: el amor sostenible. Lamentablemente este nuevo modelo de amor será prohibido, de hecho está prohibido desde hace ya muchos años. Pues los amantes sostenibles sólo podrán llegarán a su cita en la plaza o en el parque totalmente desnudos. No hay más remedio; los amantes serán arrestados. Son culpables de amarse sin dejar huellecitas de carbono bajo la forma de desplazanmiento motorizado, de consumición en una terracita, de ropa de la cual se han despojado.
10 comentarios:
Como la política, la economía y la producción, hay que desglobalizar el amor. Se impone la necesidad urgente de amar sin prisa a los que están justo al lado.
Con el tiempo y una bici (o un globo, o un velero) se puede amar a gente de sitios remotos, pero con moderación (en cuanto al número, no en cuanto al amor)
Lo apunto en mi libreta: el fin de los combustibles fósiles harán realidad mi deseo juvenil de ser aeronata
El globo es muy listo y negocia contigo todo el tiempo el porcentaje de control que tienes sobre él.Sabes en que dirección vas, pero no exactamente donde acabarás.
En ocasiones caes en un campo de alcachofas, en otras, abrazas un pino. No es descartable tener un pequeño chapuzón. El globo no asusta a los animales (es curioso y no creo que su vuelo casi silencioso sea la razón; creo que es la forma redondeada lo que hace que no lo vean como una amenaza)
¡Los globos son tipos gordos y maravillosos que te dejan llegar casi donde quieres y casi como a ellos les da la gana!¡Son como una madre!
Ojalá fuese tan fácil amar de forma sostenible y desglobalizada.
Hace mucho tiempo que me di cuenta de que uno no puede decidir dónde y cuándo pone sus afectos; que si te enamoras o no te enamoras no es algo que puedas planear como si fueran unas vacaciones en la costa. El amor, el desamor, las relaciones entre las personas, salen siempre por peteneras porque la vida afectiva es una mala pécora: va siempre cargada de malas intenciones para ti, y no le importa nada con tal de salirse con la suya.
Alguién dijo que "la vida es una retahila de corazones rotos" Eso es el fin del amor romántico. Pero todos llevamos un kit de enamoramiento de emergencia que se activa a veces al menor movimiento, imposible de impredecible cuando disparará su mecanismo, aunque a veces uno alberga ciertas sospechas. En cualquier caso, es el después, justo el después cuando uno tiene la certeza de que el mecanismo no ha funcionado para el otro
pellicer, suscribo tú declaración de amor al globo, es preciosa y debería ser entregada inmediatamente por correo a todos los habitantes de Mandril. Me puedo imaginar perfectamente la ciudad cubierta de globos, como en la películo "El Globo Rojo"
pellicer, pellicer...¿los globos se desinflan?
Luz Negra:
Si el amor no nos sorprendiera sería como un experimento de laboratorio: los resultados son previsibles siempre.
En la incertidumbre reside su doloroso encanto.
Dominguet:
Los globos aerostáticos se inflan con aire caliente (más caliente que el aire exterior al globo) y por eso flotan.
Si falta calor, nos vamos para abajo. Si esta aumenta, subimos hacia el cielo.
En cualquier caso, el globo es amable y nos sube y nos baja con solemne lentitud. El problema no está en caer, el problema está, como en todo, en la gracia con la que aterrizas.
Oh Pellicer! Eres un maravilloso observador y un delicadísmo poeta!
Anda ya!!! Ja, ja, ja...
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