Algunos signos claros, por ejemplo, el teléfono cortado desde hace semanas y una paloma que se posa en el alfeizar de la ventana con un mensaje, nos indicarán cuando debemos abrir nuestro pequeño almacén del futuro
Almacén futurista
El último proyecto de esta diminuta fábrica de ideas es la creación de una caja de futuro. No es una caja, sino cientos de millones de cajas de futuro.
En su interior depositaremos las herramientas, los planos, aquellos conocimientos y objetos que puedan servir para algo; desde hacerse la ropa uno mismo hasta semillas variadas que estuvimos guardando antes de desayuno durante años. Como creemos en el porvenir cada uno de nosotros fabricará un pequeño almacén de futuro. Un pequeño almacén de futuro podría ser como una maleta que uno se lleva a una isla desierta, muy desierta y que pudiera pasar de unos a otros, transgeneracionalmente. Un gran apagón, un meteoro que cruza el horizonte, otros signos que ahora nos resulta imposible predecir nos indicarán cuando la debemos abrir.
1 comentario:
Uffff... me resultaría tan difícil elegir lo que metería en la maleta (sería una maleta enorme, en mi caso)... casi tanto cómo identificar el signo que nos indique que es hora de abrirla... Porque, ¿qué pasaría si la abríesemos demasiado pronto?
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