jueves, 16 de diciembre de 2010

Algunas historias de gigantes


Algún dia toos los gigantes serán así

¡Hola gigante hola!

El gigante ha recibido una pedrada en la frente. Se tambalea, camina unos pasos y caé sobre Mandril, destruyéndola para siempre.

Y no queda nada de Mandril. Ha quedado sepultada por un cuerpo enorme bajo el cual se perdió todo aquello por lo que merece la pena estar vivo. Si. Allí quedó el automóvil de Dominguet. No sabemos si Dominguet pereció aplastado entre el amasijo de hierros del coche por el brutal peso del gigante o si se largó en bicicleta a tiempo.

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