El etarra moderno comprueba en que momento se superan los límites, y entra en acción
El etarra moderno
Para pertenecer a la ETA moderna uno debe levantar su sombrero y quitarse de la cabeza un montón de prejuicios.
Ser un etarra moderno es ser una herramienta low-tech. Un etarra debería llegar andando en bicicleta o en patines a Alicante antes que un tipo en camión o coche o avión supersónico. Hace tiempo ya demostramos que los hombres de nueva generación, aún yendo muy despacio, siempre llegábamos antes. Para entender al etarra moderno hay que comprender el principio de la no violencia etarra, más aún cuando en este mismo momento, una vez superados los umbrales de biocapacidad del planeta, sobramos algunos cientos de millones de personas, si no miles de millones, y usted se encuentra entre ellos. Una agricultura tecnificada y basada en el petroleo, tanto en su maquinaria, como en sus fertilizantes derivados de petroleo nos ofrecen un panorama desolador. La situación es la siguiente; A) Una población mundial que ha crecido al mismo ritmo que el consumo masivo de combustibles fósiles B) Herramientas que matan, y matan mucho. A estos dos factores los relacionamos con una agricultura y a una industria en colapso. Es ahí cuando el etarra moderno entra en escena, lleva un ramo de flores en la mano y va descalzo. No tiene ninguna posibilidad, pero sin embargo, él es la única posibilidad.
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