Parece un texto encriptado. No lo es. La letra es fácil de reconocer, pero dificilmente descifrable
Notificación de expropiación
Notificación de expropiación
A continuación exponemos públicamente la diligencia donde se detalla el proceso contra Emilio Botín y la expropiación de sus propiedades.
Emilio Botín Sanz Santuola García de los Rios, le escribo esta carta para informarle que por avatares de la historia sus propiedades serán colectivizadas pasando a ser de uso comunal el 2-2-2022, más exactamente a las 2 de la tarde. No debe usted preocuparse de nada, pues se trata de una revolución planetaria sin centro ni libros capitales ni jefes, en donde su pasado no le perseguirá y usted podrá cultivar, si lo desea, su huertecito biológico sintiéndose UNO con el cosmos, o bien, ayudar a amables ancianitos a transportar sus cestas de fruta sin transgenizar o llegar a parques y plazas como titiritero y entregar su corazón palpitante a mujeres y hombres que han dejado de ser espectadores. ¡El Mandril del mañana necesita de miles de titiriteros!, justo cuando la televisión caiga en desuso. Su afán de superación monetaria encontrará otros lugares hacia donde reconvertirse, más que nada porque para entonces el dinero tendrá fecha de caducidad, y claro, no podrá acumularse. Podría si le apetece, participar en las fiestas populares con la calabaza más grande cosechada o como cabezudo. En fin, espero que no se enfade mucho por el asuntillo este de la expropiación. No es nada personal, de hecho ya le estoy viendo llegar a Mandril sobre un patinete cantando canciones revolucionarias compuestas por usted.
Mandril a Domingo 31 de Mayo de 2009
Dominguet, Óscar Alajarín y Elvis Pérez
Dominguet, Óscar Alajarín y Elvis Pérez
3 comentarios:
Brillante carta, por cierto, pero tengo que desvelar un terrible secreto del que supe hace muchos años:
Los presidentes, en particular los de los bancos, no leen.
Digo yo de quedar todos (un sábado de estos, ya se sabe) para ir a la puerta de su casa y gritárselo.
Entonces no leen cartas¡Vaya desilusión!. ¡Oh!, pero lo de gritárselo...¡yo pensaba qué eran sordos!
¡Mierda, es cierto, están cerrados a cualquier estímulo sensorial o idea que no proceda de ellos mismos!
Bueno, pues no nos queda otra: política de hechos consumados con preaviso pero sin esperar acuse de recibo. El día que Don Botín llegue a su despacho y lo descubra ocupado por un taller de construcción de títeres, reaccionará...no imagino cómo, pero de algún modo reaccionará.
Otra cosa no serán estos tíos, pero reaccionarios...uf, en cantidad.
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